Según el INE (Instituto Nacional de Estadística), el porcentaje de tele-trabajadores ha pasado en nuestro país del 7,5% a comienzos de año al 48,8% en la actualidad, lo que explica que la inversión en oficinas se ha reducido en un 45% en el tercer trimestre de 2020, en comparación con los datos de 2019. Tras el shock inicial producido por la pandemia del coronavirus, muchas organizaciones han hecho un considerable esfuerzo para hacer el teletrabajo más productivo, a través de inversiones, medios, tecnología y formación. Así se ha descubierto que muchas tareas se desarrollan mejor desde los hogares, sin desplazamientos innecesarios que generan pérdida de tiempo, estrés y emisiones contaminantes.

¿Quiere esto decir que el teletrabajo ha llegado para quedarse? No. Lo más probable es que tras la pandemia se establezca un modelo mixto de trabajo en el que se aprovechará lo mejor de las posibilidades de trabajar en remoto con lo mejor del encuentro físico en la oficina. La pregunta, por tanto, no es “cuándo” regresar a la oficina, sino “para qué”. Y el modelo que empieza a imponerse es el de las grandes organizaciones que tenemos en el imaginario –como Apple o Google–, en el que las sedes corporativas son lugares de encuentro, de socialización y de aprendizaje, más que espacios para realizar actividades personales e individuales.

Recientemente, más de cien líderes de gestión de personas, ingenieros y arquitectos de espacios corporativos de grandes empresa en más de 15 países, participaron en una campaña de la multinacional del diseño y gestión de espacios corporativos 3g Smart Group para determinar cómo serán las sedes corporativas de las compañías en la era pos-COVID. Las conclusiones a las que se llegó es que las oficinas se transformarán en Smart Space, espacios de trabajo multiuso, escalables y adaptables, que puedan transformarse con naturalidad mediante divisiones móviles que admitan múltiples configuraciones, optimizando así el uso de los espacios.

Javier Mosquera, director general de 3G Office Argentina, re-imagina así los lugares de trabajo a partir de 2021:

 

El diseño de las nuevas oficinas se centrará en las personas

“A medida que el trabajo sea más flexible, la oficina será un lugar más cómodo y humano, orientado a las personas y su bienestar. Y para eso, el diseño de las nuevas oficinas se basará menos en el puesto de trabajo individual y necesitará un enfoque más holístico y orientado a la experiencia de los usuarios, sus perfiles, journeys e interacciones, sus actividades y necesidades reales (activity based planning). La oficina será un entorno que brindará experiencias, entrenamiento y tecnología”.

“Al mismo tiempo, el diseño del espacio estará cada vez más influenciado por los principios del Agilismo: células de trabajo como “motor” de espacios multiuso, adaptables, re-configurables y auto-componibles, capaces de expanderse o contraerse como un acordeón, acompañado el desarrollo de equipos “escalables” y necesidades cambiantes, siempre incluyendo áreas para reuniones dinámicas e informarles”.

Modelo de trabajo distribuido en las nuevas oficinas

“La crisis demostró que el trabajo ya no es la oficina a la que se va, sino la actividad que se realiza, más allá del lugar. No obstante, el trabajo enteramente remoto puede ser inviable para muchas personas y organizaciones, por lo que se explorarán modelos de trabajo distribuido, con personas trabajando juntas, independientemente de su ubicación física: unos en la sede corporativa, otros en satélites intermedios o en espacios de coworking y otros desde casa, todos interconectados a través de tecnologías y con aplicaciones online para reserva y administración de lugares, que permitan optimizar la ocupación del espacio”.

“La sede corporativa formará parte de este ecosistema distribuido de lugares, aunque será menos relevante. Será a donde los que quieran podrán ir para reunirse y colaborar en persona, fortaleciendo así las relaciones y reforzando la cultura de la organización”.

Las oficinas pos-COVID serán espacios multiusos adaptables mediante tabiques móviles

Comunidad y sentido de pertenencia

“Nada puede reemplazar el tiempo cara a cara con los compañeros de trabajo, porque esa proximidad y resonancia acelera la química que fortalece vínculos, y conduce a la confianza. El espacio físico deberá facilitar lo que se conoce como “momentos intermedios”, los que ocurren antes y después de una reunión, en la pausa alrededor del café, en las impresoras o en las charlas de pasillo. Porque son el escenario ideal para el contacto social informal que construye la cultura de una empresa y mantiene el sentido de comunidad”.

“Las nuevas oficinas serán cada vez más una plataforma para fomentar la colaboración y la interacción social física, porque es lo que genera el compromiso mutuo, el sentido de pertenencia compartido, y el capital social, sin lo cual la colaboración virtual es ineficaz”.

Cultura y valores de la organización

“Se ha hecho evidente que es posible trabajar flexiblemente desde cualquier lugar, pero el lugar para la comunidad y la colaboración cara a cara seguirá siendo la oficina, porque ofrece la experiencia de la interacción social que la virtualidad no consigue. La oficina es una declaración de personalidad, una manifestación física de los valores de la organización, un motor de cultura, ideas e innovación, un espacio más orientado al exterior, más poroso hacia la comunidad. Desde el momento en que alguien ingresa, comienza un proceso de inmersión en la marca a través del comportamiento. Por eso el espacio y la presencia física será fundamental para atraer a las personas y volver a generar la confianza y la cultura en el lugar de trabajo”.

Las oficinas pos-COVID serán espacios multiusos adaptables mediante tabiques móviles

“Smart Space”

“En un contexto cada vez más líquido, la oficina convencional con escritorios fijos y salas de reunión resulta ser una de las principales barreras para las nuevas formas de trabajar. El diseño de entornos más flexibles, adaptables y en beta permanente, permitirá a los propios usuarios ser protagonistas del cambio. Con naturalidad y a través de simples cambios, ellos podrán configurar espacios para cada actividad y necesidad, desde el trabajo individual y concentrado hasta trabajar en equipo y en proyectos con equipos distribuidos y en constante transformación”.

“Será clave diseñar las nuevas oficinas como un espacio de trabajo multiuso y escalable que –como un organismo vivo– pueda transformarse con naturalidad según la capacidad, y adaptarse fácil y rápidamente a las necesidades cambiantes y actividades diversas, y que –a través de mobiliario flexible y tabiques móviles– admita múltiples configuraciones, optimizando el uso del espacio”.

Paisajes de trabajo diferenciados

“Las personas ya no querrán ir a la oficina para hacer un trabajo individual que pueden hacer en casa. Para atraer y retener el talento, en vez de espacios uniformes, las organizaciones necesitan ofrecer una variedad de “paisajes de trabajo” diferenciados, dispersos y personalizados, de manera que permita satisfacer diversos tipos de trabajo y formas de hacer las cosas: trabajo individual y concentrado, en equipo y por proyectos, interactuando con colegas en forma presencial y a distancia, utilizando metodologías ágiles, intercambiando ideas en workshops dinámicos, presentaciones o en un café informal”.

“Se trata de crear paisajes de trabajo diferenciados que reconozcan la individualidad de cada persona y que incorporen lo informal, promoviendo un uso más eficaz del espacio al activar zonas de circulación y áreas intermedia como espacios de interacción para facilitar el intercambio de información y las construcción de relaciones”.

“La pandemia vio la vida laboral rápidamente reinventada en el espacio digital, abriendo los ojos de muchos a la forma de trabajo más flexible y a una nueva “realidad híbrida” donde lo físico y lo digital empiezan a integrase con más naturalidad”.

“Como resultado de la COVID-19, el rol de la oficina deberá re-imaginarse como un espacio flexible y adaptable, integrado por paisajes de trabajo diferenciados, centrado en las personas, parte de un ecosistema distribuido de lugares, motor de la comunidad y el sentido de pertenencia y reflejo de la cultura y valores de la organización”.

Nota:
3g office es una empresa internacional de servicios de consultoría, ingeniería y arquitectura corporativa. Con partners en todo el mundo, ha participado en la creación y desarrollo de más de 4.000 proyectos de distintas dimensiones en más de 25 países. Entre sus muchos proyectos afrontados con éxito, se encuentra la nueva sede de Vocento y ABC en la que Tabiexpert Espacios Móviles S.L. colaboró con la instalación de TABIEXPERT TX-107, nuestro modelo con mayor número de instalaciones.